El resultado de la primera vuelta electoral dejó a Sebastián Piñera y Eduardo Frei como los únicos candidatos que deberán disputarse al electorado el próximo 17 de enero de 2010.

Sin embargo el mayor damnificado fue el candidato independiente Marco Enriquez-Ominami, que con un 20,13% no le bastó para pasar a segunda ronda. No obstante ello, el ex candidato sigue estando en la noticia y hoy más que nunca, ya que ese porcentaje de votos se lo disputarán Frei y Piñera en la segunda vuelta.

Lo patético de todo esto es la forma que estos dos candidatos buscan granjearse la simpatía de estos votantes. No tienen vergüenza en señalar que las ideas del malogrado candidato también representan las propias, cuando fuimos testigos en los debates que todos, Arrate, Enriquez-Ominami, Piñera y Frei proclamaban que sus propuestas eran totalmente distintas y por tanto, las mejores.

Ya se escuchó a Frei en su discurso a "invitarlos" a votar por él y a Piñera, en el propio, a que "se sumen" a sus ideas porque son muy similares.

A Frei (29,6%) no le resultó subir a su campaña a Bachelet, a la madre de Bachelet y al hijo de Bachelet. Tampoco el cambio de look que con su estirada mujercita quisieron mostrar, o los intentos de parecer un bailarín cuando tiene menos ritmo que una babosa, o reírse de su propia nariz. Es decir, intentó ser lo que no es; Hoy quiere arrimarse a Ominami y sube a su carro a más ministros renunciados del actual gobierno.









En tanto Piñera (44,05%) también hace lo propio. Ya está trabajando para encantar a este sector viajando en el Metro o bien con sus ya repetidas frases del cambio, de más trabajo, de más seguridad, de más justicia, de más equidad social, sin embargo aún no vende una sola acción de sus empresas, continua en juicios con ciudadanos de este país y que se niega a pagar. Sigue a la cabeza de todas sus empresas, es decir, sigue engañando a la gente y la verdad este país no quiere más engaños.

En efecto, los chilenos no quieren engaños ni promesas al voleo, tampoco ridículos maquillajes y efímeros looks.

Buscamos seriedad, propuestas concretas y viables, necesitamos seguridad en las calles, mejor educación en los colegios y real acceso a las universidades para nuestros hijos, necesitamos un mejor sistema de salud público, mejores hospitales, tecnología, médicos, no más esperas de largos meses por una intervención quirúrgica. Necesitamos un mejor sistema judicial, pero no solo que termine con la puerta giratoria, sino que también termine con los delincuentes de cuello y corbata, que caiga sobre aquellos que con el poder, el estatus social ó el dinero consiguen eludir la acción de una verdadera justicia.

Necesitamos crecer y desarrollarnos porque no nos alcanza. Ya no engañamos a nadie vociferando que tenemos la mejor economía de la región, porque en verdad somos, después de México, el segundo país más caro de Latinoamérica y los sueldos no alcanzan. La ya inexistente clase media no puede vivir con sus ingresos.

Recien nos han incorporado al grupo OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) un club selecto de países desarrollados ( los 30 países más ricos del mundo) donde nuestro ministro Velasco muy orgullo recibió la invitación, una "invitación" que tiene como costo de incorporación US$7 millones. Es un chiste; Chile integrando un club donde sus miembros nos doblan en ingresos. ¿De qué nos sirve?. Seguimos engañados.

Yo soy parte de ese 20,13% (1.396.655) y ninguno de estos dos me convence. No me seducen sus propuestas. Frei, más de lo mismo, políticamente hablando; Piñera, promesas que no cumplirá, en consecuencia, más farsas.

¡Vaya dilema!