Encendida está la carrera de los candidatos que ostentan el sillón presidencial. Y pareciera no importar la forma, porque ya comienzan las potenciales "primeras damas" a denostar y atacar al candidato oponente al de su querido esposo. Si bien Luisa Durán ya no se postula con su marido Ricardo Lagos, no pierde oportunidad de lanzar dardos al vecino y también al de la vereda de enfrente, criticando a Marco Enriquez Ominami de " Para ser presidente se necesita experiencia y cultura. No haber ido al teatro, hecho una película, leído un libro, sino mucho más ".

Doña Marta Larraechea, la mujer de Frei que sí se postula a presidente, no solo ha atacado al oponente sino también ha caído en desinteligencias sacando a la luz hechos de algunos personeros de su mismo conclave político. Nada más perdida a quien disparar y claro, no es de extrañar su marido Edo. Frei, el romántico viajero se le olvidó la porquería de gobierno que hizo pero critica a diestra y siniestra. Quiere repetirse el plato, pero Chile y sus votantes parece que dejaron de lado la estupidez y miran el futuro a través de otros oferente en política.

Piñera y sus promesas ya cansan, quizás no tenga la oportunidad de demostrar que se la puede, pero con tanto del mismo discurso, cansa. Quizás sea la corriente que debamos seguir, pero a no olvidarse que Sebastian no es tampoco de los trigos limpios y eso, a la larga, pasa factura.

Marco Enriquez es sin duda una corriente política nueva o político joven como quieran. Se rebela de su partido Socialista apartandose de elos e inica su propia carrera. Ante esta hecatombe, todos los viejos estandarte se le echaron encima con ataques certeros a la yugular, como fieras. A ratos pienso que puede ser una alternativa; Es joven, no tiene vicios políticos, parece representar al sector que no está inscrito en los registros electorales y está dispuesto a rodearse en su eventual gobierno de gente capaz sin importar que no sea de su partido político.

En fin, esto, más el escandalo de los dinosaurios que ven amenazado su nicho de vida, aquel que por toda la vida ha sustentado sus mesas sin trabajar mucho, le dan el condimento a estas elecciones presidenciales que se avecinan. Pero lo que importan son los programas de gobierno y en eso debemos tener cuidado al momento de votar. Ya algunos nos contaron el cuento, otros desde su trinchero han prometido el oro y el moro y los nuevos una serie de cambios que deben ser debidamente analizados. Como sea, nos vemos enfrentado una vez más a elegir políticos, un mal necesario; Lamentable.